Tras un comienzo de Trofeo Marca tormentoso (en tiempo y resultados) este domingo por fin salió el sol para Motor Carrera…y vaya si salió: Sol de justicia en el Panceta Arena de Hortaleza solo atenuado por la repentina activación del riego automático para refrescar los campos e iniciar un conato de concurso de camisetas mojadas.
Sin mas preámbulos dio comienzo un partido que, con total seguridad, no pasará a los anales de la historia balompédica: profusión de rustic style y físicos mermados por las altas temperaturas, el paso de los años y las cervezas de toda una vida (no necesariamente en este orden). Transcurría felizmente este bochornoso espectáculo cuando el enemigo aprovechó un saque de esquina, reguleramente ejecutado por el que escribe, y un cierto despiste de la defensa para lanzar un contraataque que acabaría con un payo rematando a gol mas solo que la una. 1-0. Y es que empezar palmando es de equipos grandes.
Cuando las masas de aficionados motorcarreristas empezaban a inquietarse y a silbar a Chocho por sus filtraciones a la prensa apareció Marcos Chicharito Sanchez para calmar las aguas: gol del fichaje estrella y empate en el luminoso. 1-1.
Como la labor social de Motor Carrera solo es comparable a la de la ONCE (y solo porque a ellos les dejan vender cupones y a nosotros no) les dimos una segunda oportunidad a la horda azulona: torrija de Víctor siendo el último defensor, perdida de balón [en un alarde de manipulación goebblesiana he convertido en gol una perdida de Victor sin consecuencias y he obviado que el segundo gol vino de un mal despeje mío que salió hacía el centro. Es lo que tiene ser el quinto poder…] y 2-1 al canto. Sin mucha mas historia y con los jugadores cociéndose a fuego lento llego el descanso.
La cosa estaba malita…
Pero si algo sabe hacer este equipo es sobreponerse a la adversidad (menos todas las veces que no lo hacemos y perdemos…pero esas veces estamos en crucis) y eso hicimos: seguimos la ancestral táctica de meter docenas de balones a la olla sin ton ni son hasta conseguir dejar ciegos a los defensas rivales de tanto mirar al sol. Cuando sus retinas ya estaban a punto llegó el centro bueno para que lo rematará Diego: el balón dio en el palo y en toda la plantilla del rival traspasando la línea de gol en algún momento. Ni el arbitro ni los que estábamos lejos vimos entrar la pelota así que fue necesaria la intervención rauliana de Marcos para acabar de meterla. 2-2 y como somos anarco-neoliberales y nos la suda lo que diga la autoridad le apuntamos el gol a nuestro benemérito delantero.
Como empatar y repartir puntos es a todas luces ineficiente para la humanidad y produce entropía a cascoporro decidimos seguir colgando balones hasta que sonara la flauta. Sorprendentemente, a pesar de que no estaba con nosotros el-unico-que-sabe-jugar-al-futbol, el gol llegó y lo hizo de nuevo en las botas de Marcos que no cree en el reparto equitativo de la riqueza ni de los goles. 3-2.
Con la satisfacción del trabajo mediocremente hecho y con los depósitos ya en la reserva acabamos el partido como se estila en estos casos: pidiendo la hora y con Chocho demostrando que con el ojete también se pueden parar balones:
Notas de interés y apuntes de sociedad:
- Numerosas ausencias esta jornada: Rubén en misión secreta con el instituto armado, Álvaro jugando a los médicos (medicina oriental, claro), X.X. saltándose sus obligaciones laborales y gafando a Frenando Alonso en Barcelona y Marco recolocándose las vertebras tras concebir un nuevo bufalín (o bufalina).
- Pobre entrada este domingo, concretamente cero personas ya que Mar entró al campo con acreditación de reportero gráfico y Rocío y Julia (aka “La Maldición de la Perla Negra”) vendiendo al equipo de sus amores por darse a la bebida a escasos cincuenta metros del terreno de juego.
- Dos goles de Marco para, a pesar de la ingente carga que supone llevar la camiseta de Charlie, afianzarse en lo alto de la tabla de goleadores. El tercero en discordia se lo damos a Diego tras consultar el ojo de halcón y las leyes de la fluidodinámica.
- Buen partido de Chocho siguiendo la racha positiva que empezó con el penalti de la primera jornada y aprovechando que la crónica no la iba a escribir su archienemigo coruñés.
- Jran actuación del colegiado a pesar de comerse todas las jugadas en las que estaba Diego de por medio: el gol fantasma, una triple mano en el área y el pisotón de la imagen que casi provoca un lanzamiento de bota a lo Arda Turan:
- Y decimos que la actuación del trencilla fue de jrande a pesar de los errores porque demostró un manejo de la lengua de Shakespeare y una vis comica dignos de todo elogio: su actuación estelar la inició antes del pitido inicial con un “¿están listos los whites?” que nos dejo ojipláticos y la culminó en todas las faltas con barrera con sus “solo se pueden tapar la cara y los guevssss…para ti (Pedro) huevos”.
- Tercer tiempo con entremeses de Roquefort radiactivo regados por abundante cerveza que, los mas valientes, prolongamos hasta las ultimas luces del día.
Sin mas cierro esta crónica esperando que no haya mas espantadas del cronista habitual ya que uno no puede levantar España desde las 8 de la mañana y luego escribir estos magistrales relatos sin violar el Estatuto de los Trabajadores y la Carta de los Derechos del Niño. Salud y buena semana mozalbetes.
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