15ª Jornada de Liga

Como Leónidas antes de comenzar a matar en el paso de las Termópilas, como Octavio Augusto antes de la batalla de Filipos, como Fernández de Córdoba <<El Gran Capitán>> al desembarcar en Italia, como Juan de Austria en La Real antes de dar por saco a La Sultana y demás naves de la falsa religión del Turco, como Federico II El Grande de Prusia pensando en qué hacer en Lobositz, como Blas de Lezo en Cartagena de Indias, como Napoleón en Austerlitz, Jena, Marengo, Borodino y demás, como Vasilevski pensando su contraofensiva de Stalingrado. Sé que olvido un porrón de acontecimientos importantes que tuvieron unos días previos, con el nervio a flor de piel, esas mariposas en el estómago que sintieron estos Jrandes por una batalla -o como las que siente Chechu delante del escaparate de Scalpers-. Hoy, miércoles, a cuatro días de la batalla final que decidirá si tenemos posibilidades de que la virginal Victoria Final se venga con nosotros, lo que sintieron estos tipos duros, que me perdonen si coincido con ellos alguna vez en el más allá, se queda en cagarruta de cría de colibrí ya que sus hazañas no aguantan una comparación racional (ni una comparación de mierda tampoco) con la empresa de ganar la Liga del Distrito de Hortaleza.

Y hoy, 30 años después de esa especie de Golpe de Estado que leyendo y releyendo sigue dejándome un regusto a que no fue más que una sórdida payasada mal planteada -o perfectamente planteada por el lado oscuro de la fuerza- llamo a filas a todo hijo de vecino en edad de cargar con un fusil o, en su defecto, capaz de ponerse unas botas de fútbol y defender a Motor Carrera. Y para eso les emplazo, soldados/jugadores, este domingo (ya, no es buen momento para pelear el Día del Señor, pero va de oficio ignorarle en estos lances) a las 16.00 en los famosísimos campos Luis Aragonés (mapa de situación para que planeen estrategias de flanqueo o ataque oblicuo si lo desean). La parte mala, no todo iban a ser ventajas tener todo que ganar y nada que perder, es que el campo -de batalla, claro- es el primero de los pequeños y ya sabemos que no somos proclives a extender nuestro mejor fútbol en esta superficie. Sin embargo, estoy convencido de que el vídeo que a continuación se les adjunta -el cual pueden visionar cuantas veces quieran- ayudará a que el juego de Motor Carrera sea el de las mejores ocasiones y si no, que nos dé para ganar. Unos ocho minutacos de vídeo que nos hemos currado, ¡espero que lo disfruten!

Hoy más que nunca, ¡Fuerza y honor a Motor Carrera!

Ver en pantalla completa y HQ preferentemente.