Partido sin historia

Perdiendo la apuesta de copa gratis me dispongo a escribir una crónica más larga que el “ganamos 5-0, punto” que unos querían que escribiese. Hecho el prólogo no cabe sino destacar que el título hace plena justicia a lo que se ha visto hoy en los campos Luis Aragonés en una hora de domingo más digna de siesta o sobremesa que de partido de fútbol.

¡Y pitido inicial! Salimos más pendientes de cómo se lo tomaban ellos, que eran un porrón de gente, a jugar nuestro fútbol teniendo en cuenta que hoy no teníamos ni a uno sólo de nuestros defensas titulares y que sólo había un cambio. Con la calma propia de no querer reventarnos en diez minutos comprobamos por qué Me da igual va colista ya que no tuvieron empuje alguno viendo lo mermada de nuestra plantilla de hoy. Así que con toque, intentando no correr como pollo sin cabeza y dejándonos de tonterías para otros momentos conseguimos un par de jugadas de interés que no terminaron en gol ya que, somos así, desperdiciamos ocasiones de gol con la misma alegría que con la que Göring y Heydrich preparaban soluciones finales (guiño a Vigalondo). También suele ser habitual terminar marcando en una jugada en la que pecamos de individualismo y este partido no fue excepción y Álvaro terminó marcando de tiro cruzado el primer gol de la tarde (o mañana, dependiendo de la hora a la que vuestras mercedes se levantasen hoy). Mientras Chocho se tomaba un café y se echaba una partidica a la brisca nosotros seguimos con el balón controlado y de una falta lateral nació el segundo gol: centro de un servidor que remata de cabeza ante la pasividad de la defensa rival Luis que amortiguó el balón con esos rizos tan suyos. Creo que sus cabellos de oro fueron la inspiración de Disney para esta nueva película de dibujos, Enredados.

Y tras el descanso, más de lo mismo; partido monotemático de Motor Carrera que si bien no quería -o no podía, quien sabe- tocar a degüello no permitió que el rival tuviese la más mínima oportunidad y de tanto ir el cántaro a la fuente pues caen goles, qué remedio. Otros dos de Álvaro y uno de Luis con la inestimable ayuda del portero rival que decidió que el centro del rubio era merecedor de convertirse en gol. Manita al colista para llegar con ánimo al próximo partido, al que llegaremos con dos puntos de ventaja contra Los Ángeles ya que nuestros informadores nos han comunicado que ganaron 3-0 a Mambo.

Mourinho y su anecdotario:

• Hoy tenemos para casi todos en las ausencias ya que sólo aparecimos ocho personas (de trece) a jugar el encuentro. Faltas de Toni, en Londres como suele; Marco, celebrando su cumpleaños; Fernandito, de cuidados intensivos con tres puntos en la ceja por su pelea de cumpleaños; Pedro, de vacaciones en Argentina y Rubén, el único con excusa decente: trabajando. Las faltas de Pedro, Fernandito y Rubén, si sois listos, suponían que hoy Motor Carrera jugaba sin defensas, pero Chechu y Víctor hicieron un trabajo decente aunque llegase yo en los últimos momentos para dejar el listón algo más bajo. Eso sí, sin defensas logramos dejar la portería vacía…y no diré si fue gracias a nosotros o al rival.
• Pues eso, Rocío volvió a ser la única aficionada de Motor Carrera y sumó una incumple-palabras más a sus amigas: Almudena (creo) que mucho presumir de alcoholismo y drogadicción pero luego faltamos a la palabra dada…está la sociedad para estas florituras. Por contra, Me da igual será último de la liga, pero tiene fidelizada a la afición y al menos había nada más y nada menos que ¡tres! mujeres viéndoles jugar; algo increíble para Motor Carrera.
• Hat-trick de Álvaro que se consolida al frente de la clasificación de goleadores, lo que le permite soñar con su segundo pichichi consecutivo y doblete de Luis, el rizos que se coloca con cinco goles. Enhorabuena al aeronáutico que supera su barrera anotadora, con ayuda rival, si; pero superándolo.
• Chocho podía haberse quedado en Cerceda o empezar su viaje antes de tiempo porque hoy no tuvo nada de trabajo y se limitó a hablar con las aficionadas de Me da igual y a ver cómo marcábamos cinco goles. Por fin, el Zamora de la Liga baja de gol por partido después de haber subido a más de uno por encuentro tras Hispania. Ahora, el camarada portero tiene una media de 0.9167 goles encajados por encuentro y encima pretende faltar la semana que viene. Las traiciones a la Patria estaban pagadas con la vida en su amada URSS, sólo digo eso. Además, el portero demente quiso su punto de protagonismo (ya que no iba a parar ni un balón) y en el descanso decidió ser el centro de atención con su parsimonia para ir a beber agua y volver, mirándonos incrédulos y mientras en los campos se hizo un silencio eterno él se puso, tranquilamente -la cosa no iba con él-, los guantes para empezar la segunda mitad.
• Los rivales sabían de sus limitaciones ya que soltaban frases del estilo “si es que no tenemos ni idea”, aunque intentaban atemorizar con gritos de guerra cerca de nuestros cuellos, sino que se lo pregunten a Luis y eran un poco gritones y piscineros; para muestra, el que se tiró gritando al suelo a diez centímetros de mi bota. Eso si, hizo que Chocho tuviese un momento de entretenimiento y se riese un poquito porque estaba el hombre sin saber qué hacer.
• Nuevo árbitro que nos dirigió hoy tras tres años por los campos estos de Dios. Lo cierto es que no era nada del otro mundo y pitaba basándose en el teorema de “ha sonado ergo…falta” pero al menos tenía cara de simpático y confraternizó con Luisillo al llevar leotardos elásticos en un día de solaco y calor.
• Tercer tiempo invitados por Fernandito que ayer cumplía 22 años y que se llevó, de regalo, tres puntos en la ceja. Se nos chafó el plan de ver al Madrid en casa de Charlie y cada uno se fue a la suya a ver cómo Adebayor lleva la mitad de goles que Benzemá en sólo 90 minutos y que Católico Ronaldo se dejase de tonterías de agobios, que para eso ya estoy yo.

Siento defraudar a Luisillo y perder una copa gratis, pero ya que estoy en el paro me tengo que entretener con algo y este vloj es bueno para ello. ¡Añadan lo que quieran!

El ‘tesoro’ de Luis; esa cabellera rubia que le permitió anotar tras saque de falta y que el enamoramiento del portero (a la izquierda) hizo que le dejase anotar un segundo